Debido a la situación actual, es muy posible que exista un aumento notable de la ansiedad al acudir a una entrevista de trabajo, lo que definitivamente está influyendo en el ánimo de las personas que buscan empleo y son llamados a entrevistarse.
Actuando como seleccionador en una entrevista laboral, siempre he tenido que esforzarme en tratar de crear el ambiente más propicio para que el candidato se relaje y pueda contestar a las preguntas de la forma más objetiva posible, pues sé que el estrés hace mucho daño a la objetividad y a la coherencia. Pero lamentablemente, no todos entrevistadores piensan ni actúan de la misma forma.
De hecho, existen entrevistadores realmente agresivos, que se convierten en verdaderas “fieras” cuando entrevistan… son esos que miran intensamente creyéndose poderosos, y que disparan preguntas en lugar de hacerlas, vigilando todos los movimientos mientras buscan debilidades. Actitud que no ayuda en nada a que fluya el proceso.
Con el pasar de los años, he creado una especie de “metodología” que me ayuda a controlar la ansiedad que generan los entrevistadores con estilos agresivos. Lo cual me ha servido para reducir los niveles de estrés generados por la situación.
Espero que esta “metodología” pueda servirte en caso de que te encuentres con estos “rufianes” del reclutamiento y selección, y puedas tomar un poco del control de la entrevista.
Te dejo entonces con estas breves recomendaciones:
- Si te ves inmerso de pronto en una entrevista agresiva o si una entrevista que parecía amena se torna estresante… Contrólate tomando conciencia de lo que dices y lo que haces, ya que para tratar de controlar una situación, debes empezar siempre por controlarte a ti mismo.
- Olvídate de inmediato del resultado de la entrevista y céntrate en el “ahora”. Crea una burbuja invisible a tu alrededor y no te concentres en analizar las preguntas que te hagan, ni en el tono, ni en la actitud del entrevistador, aunque sea irritante. Enfoca tu concentración en dar una respuesta de calidad a lo que te pregunten.
- Sé tú mismo, pero hazlo imaginando que estás en otra situación, como por ejemplo en tu anterior puesto de trabajo. Esta acción te ayudará a reducir la ansiedad al sentirte en un lugar “seguro”. Créeme, esta técnica funciona mucho mejor que fingir.
- Trata de hablar con calma y suavemente, eso te mantendrá estable y en tu propio ritmo… No dejes que el seleccionador altere ese ritmo, aunque lo intente tratando de apresurarlo.
- Cuando hice el servicio militar, aprendí a mantener la calma en situaciones de estrés haciendo presión en alguna extremidad (piernas/brazos) con cualquier cosa que tuviese disponible (incluso mi mano), esta acción me ayudaba a enfocarme y me daba un respiro para relajarme y mantener en control. En las entrevistas también me ha funcionado, ¡pruébalo!
- Solicita saber por anticipado quién o quienes estarán en la entrevista… Es decir: Si estará el que toma la decisión de contratarte, cuántos entrevistadores estarán presentes, los cargos que ostentan, etcétera. Eso te ayudará a hacerte una idea de a quienes te “enfrentas”.
- Si te encuentras frente a varios entrevistadores de este estilo, pues debes saber que será duro. Yo sólo he vivido una situación en la que había tres “fieras” delante de mí, y mi actitud fue tomármelo como un juego. Me dije a mi mismo que si ellos querían jugar a los malos, pues entonces no tenía nada que perder y aposté por jugar fuerte. Por lo que me tomé cada pregunta y cada toque de agresividad como un desafío… La verdad es que no obtuve el puesto, pero tampoco permití que jugasen conmigo. En el complejo mundo de las entrevistas también hay que saber asumir los riesgos implícitos
Reflexión: En más de una oportunidad he tenido enfrente de mí a entrevistadores con esas características, y más que profesionales de la selección parecían inquisidores… pero aún así, no he tenido más remedio que lidiar con ellos… el puesto que estaba detrás lo ameritaba.
Así que espero que estas experiencias, una vez adaptadas a tu caso y con un poco de sentido común, te ayuden a superar alguna situación similar.