¿Usted es colombiano? ¿No sabe lo que es eso?
Por: Yolanda Ossa
Mi primera experiencia como "colombiana" ocurrió en la ciudad de Boston en el año 1994. Tenía en ese entonces 11 años y por situaciones y circunstancias me encontraba viviendo allá junto con mi familia, y cursaba sexto grado (para la generación de mis papás, eso equivale a primero de bachillerato). Ese día entre al baño de las niñas y me llamó la atención percibir un olor extraño. No del tipo común que se perciben en los baños públicos para los que la palabra "extraño" es un eufemismo. "Extraño" en el sentido literal: desconocido, nuevo, raro, original… Empecé a buscar la fuente de este olor hasta que en el marco de la ventana del baño encontré un cigarrillo. Era particular. No tenia marca, ni filtro y parecía casi hecho a mano. Enrollado se podría decir. Nunca había visto algo igual, y mi curiosidad infinita me llevo a recogerlo. En ese preciso momento entró otra niña al baño. Ella era dos años mayor pero teníamos una clase juntas y por eso me conocía y sabía de mi lo más básico, que yo era colombiana. Cuando me vio con dicho cigarrillo en la mano, se rió y me dijo: "pensé que en tu país solo la cultivaban". Yo le explique la situación, le dije que el cigarrillo no era mío, y que no entendía que me quería decir ya que, en realidad, mi país no era conocido por sembrar tabaco. "¿Tabaco?", me dijo. "No. eso NO es tabaco." Mi confusión llegó a su máximo límite en ese instante. "¿Ah, no? Entonces, ¿que es?" Juro por mi vida que nunca antes, ni jamás después, he vuelto a ver una cara de asombro tal como la que esa niña puso cuando yo le dije que no sabia que era lo que tenía en la mano. Y me respondió con una pregunta, que hasta hoy no he podido superar, ni terminar de contestar:
Por: Yolanda Ossa
Mi primera experiencia como "colombiana" ocurrió en la ciudad de Boston en el año 1994. Tenía en ese entonces 11 años y por situaciones y circunstancias me encontraba viviendo allá junto con mi familia, y cursaba sexto grado (para la generación de mis papás, eso equivale a primero de bachillerato). Ese día entre al baño de las niñas y me llamó la atención percibir un olor extraño. No del tipo común que se perciben en los baños públicos para los que la palabra "extraño" es un eufemismo. "Extraño" en el sentido literal: desconocido, nuevo, raro, original… Empecé a buscar la fuente de este olor hasta que en el marco de la ventana del baño encontré un cigarrillo. Era particular. No tenia marca, ni filtro y parecía casi hecho a mano. Enrollado se podría decir. Nunca había visto algo igual, y mi curiosidad infinita me llevo a recogerlo. En ese preciso momento entró otra niña al baño. Ella era dos años mayor pero teníamos una clase juntas y por eso me conocía y sabía de mi lo más básico, que yo era colombiana. Cuando me vio con dicho cigarrillo en la mano, se rió y me dijo: "pensé que en tu país solo la cultivaban". Yo le explique la situación, le dije que el cigarrillo no era mío, y que no entendía que me quería decir ya que, en realidad, mi país no era conocido por sembrar tabaco. "¿Tabaco?", me dijo. "No. eso NO es tabaco." Mi confusión llegó a su máximo límite en ese instante. "¿Ah, no? Entonces, ¿que es?" Juro por mi vida que nunca antes, ni jamás después, he vuelto a ver una cara de asombro tal como la que esa niña puso cuando yo le dije que no sabia que era lo que tenía en la mano. Y me respondió con una pregunta, que hasta hoy no he podido superar, ni terminar de contestar:
"¿Tu eres colombiana, y no sabes que es eso?"
Lo cierto es que no. Para responder la pregunta en su sentido literal, no sabía que era eso. Pero la respuesta a la pregunta figurativa era igual. Yo, que era, (y sigo siendo) colombiana, en ese momento no sabía que significaba serlo. Ese día lo entendí. Porque entendí que ella, al verme parada en un baño con un porro en la mano, nunca asumió que eso fuera un error inocente impulsado por una curiosidad obsesiva que es innata en mí. Asumió, en su increíble ignorancia, que era perfectamente lógico que yo, una colombiana, tuviera un porro en la mano. Como es lógico ver a un alemán tomando cerveza, a un brasilero jugando fútbol, y a los gringos metidos en problemas que no les corresponden.
Maldije ese día la ignorancia de la gringa. También maldije mi curiosidad. La misma que mi abuelo tanto me admiraba, porque decía que tan grande como lo fuera, así mismo sería mi sabiduría. Pero lo cierto es que ni su ignorancia, ni mi curiosidad me habían puesto en esa situación, a pesar de que ninguna contribuyo particularmente con la causa. En esa situación me pusieron Pablo Escobar, Gonzalo Rodríguez Gacha, Los hermanos Rodríguez Orejuela y los otros pocos, pero precisos que se han encargado de manchar la historia y la reputación de Colombia.
Todos esos nombres y el legado de sus acciones nos han quitado a los colombianos muchos derechos en el exterior. Uno de esos es que ya no tenemos derecho a ser curiosos. No tenemos derecho a cuestionar, indagar, investigar, desarrollar, producir, inventar, ni tomar acción y/o paso que pueda resultar en una falla, porque de ser ese el caso, no se nos juzgaría como individuos, sino como colombianos. Y "colombianos" de acuerdo al significado que los narcotraficantes y terroristas le han dado.
En el exterior, los colores de mi bandera, símbolo que a mí me llena de orgullo, es un karma. Es una letra escarlata que llevamos, que aunque no se vea, pesa e inspira vergüenza. Y nosotros no somos un pueblo común. Nuestra nacionalidad es parte de nuestra individualidad porque es un atributo innegable, y se expresa en el patriotismo casi enfermizo que sentimos. Es difícil ser colombiano en el exterior porque se vuelve una labor de defensa y justificación constante. A nosotros no nos toca como a los italianos, que a pesar de haber sido sede de las dos entidades mas poderosas y corruptas de la historia, la iglesia y la mafia, se les admira por ser la meca del arte, de la moda, de la arquitectura, y la cuna de algunos de los mas renombrados artistas, literatos y creadores de todos los tiempos. Ni tampoco tenemos la suerte de los franceses que, cuando se presentan como tales los elogian por su pan, sus papas, sus besos, o, en el peor de los casos, por la Torre Eiffel y la costa azul. Y hoy en día se puede decir que nadie relaciona a los ingleses con la imposición del apartheid en Sudáfrica, ni con la colonización sangrienta de Australia, ni con ninguna de las atrocidades que cometieron como potencia imperial, cuando saqueaban las tumbas egipcias y recorrían el mundo entero robando el arte y los tesoros de cada pueblo. Arte que ahora reposa en los museos de Londres, donde nadie cuestiona su precedencia ya que todos son museos "reales". Y bueno, en realidad, ¿que importan un par de masacres, uno que otro santuario ultrajado y un par de cuadros robados cuando David Beckham, Los Rolling Stones y los Beatles son de allá? Y yo me pregunto, ¿como es posible que un par de goles a media distancia, una canción de un puente que se esta cayendo, y cuatro idiotas con el mismo peinado logren borrar la imagen de siglos de atrocidades cometidas por sus compatriotas? Mientras que nosotros, por cargar uno que otro avioncito con cocaína por orden y demanda del tío SAM, somos el diablo en bola.
Todos esos países, que me encantan, y contra los que no tengo nada, tienen una historia de sangre y violencia que si se mide numéricamente, supera las contribuciones que cada uno ha hecho a la humanidad. Pero aun así, brillan. Nosotros tenemos un país en el que lo bueno supera lo malo de forma exponencial. Y a pesar de eso, como diría mi padre, "estamos cagados". La Colombia que existe fuera del país, es de mentiras. De pocas mentiras, pero de tal dimensión, que superan todas las verdades que nosotros conocemos. Y los que hemos vivido en el exterior, tenemos que concientizarnos que la lucha por el país empieza con la imagen positiva que de este presentemos para limpiar la reputación que los mentirosos nos dejaron. Hay que dar la cara. La cara de verdad. Porque es verdad que aquí SE HABLA ESPAÑOL, y no solo eso, sino el mejor! Aquí, las gordas que inspiran a Fernando caminan sueltas por la calle, y Macondo no es mágico, es nuestro realismo…nuestra realidad. Aquí tenemos nieve al nivel del mar en una tierra célebre por su olvido. Y aquí se rumbea por cultura, porque nuestros carnavales son tan increíbles que son patrimonio histórico de la humanidad, porque la verdad es que SOLO en Barranquilla se baila así.
Esa es la Colombia de verdad. La de los ríos y los 2 océanos y las cumbias y los acordeones que le cantan a nuestra diversidad. La de murallas, historias, sierras, valles, montanas y cordilleras que nos surten de climas, especies y flores en toda su variedad. La de los rolos, los caleños, los opitas, y el encanto de la costa y los costeños. La misma que se invento a Gabo, a Carlos, a Juanes y a Shakira, los cuidó y los crió para que ellos salieran a proclamar la grandeza de su madre. La Colombia de verdad fue la que le metió 5 a Argentina en el Monumental de River y la que todos llevamos dentro como nuestra mayor pasión. De esa pasión debemos ser embajadores para que el mundo sepa la verdad de nuestro país. El amor por nuestra tierra y la convicción de su belleza es la mejor arma para luchar contra la ignorancia del mundo por nuestra imagen.
Pero aprendan de mi experiencia y sepan que no han sido suficientes los goles del Pibe, ni las caderas… digo, las canciones de Shakira, ni los 17 Aurelianos Buendía y las Ferminas Daza. Todavía falta. Y prepárense porque como me toco a mí, a ustedes también les tocara responder, son colombianos… ¿no saben lo que eso es?
Lo cierto es que no. Para responder la pregunta en su sentido literal, no sabía que era eso. Pero la respuesta a la pregunta figurativa era igual. Yo, que era, (y sigo siendo) colombiana, en ese momento no sabía que significaba serlo. Ese día lo entendí. Porque entendí que ella, al verme parada en un baño con un porro en la mano, nunca asumió que eso fuera un error inocente impulsado por una curiosidad obsesiva que es innata en mí. Asumió, en su increíble ignorancia, que era perfectamente lógico que yo, una colombiana, tuviera un porro en la mano. Como es lógico ver a un alemán tomando cerveza, a un brasilero jugando fútbol, y a los gringos metidos en problemas que no les corresponden.
Maldije ese día la ignorancia de la gringa. También maldije mi curiosidad. La misma que mi abuelo tanto me admiraba, porque decía que tan grande como lo fuera, así mismo sería mi sabiduría. Pero lo cierto es que ni su ignorancia, ni mi curiosidad me habían puesto en esa situación, a pesar de que ninguna contribuyo particularmente con la causa. En esa situación me pusieron Pablo Escobar, Gonzalo Rodríguez Gacha, Los hermanos Rodríguez Orejuela y los otros pocos, pero precisos que se han encargado de manchar la historia y la reputación de Colombia.
Todos esos nombres y el legado de sus acciones nos han quitado a los colombianos muchos derechos en el exterior. Uno de esos es que ya no tenemos derecho a ser curiosos. No tenemos derecho a cuestionar, indagar, investigar, desarrollar, producir, inventar, ni tomar acción y/o paso que pueda resultar en una falla, porque de ser ese el caso, no se nos juzgaría como individuos, sino como colombianos. Y "colombianos" de acuerdo al significado que los narcotraficantes y terroristas le han dado.
En el exterior, los colores de mi bandera, símbolo que a mí me llena de orgullo, es un karma. Es una letra escarlata que llevamos, que aunque no se vea, pesa e inspira vergüenza. Y nosotros no somos un pueblo común. Nuestra nacionalidad es parte de nuestra individualidad porque es un atributo innegable, y se expresa en el patriotismo casi enfermizo que sentimos. Es difícil ser colombiano en el exterior porque se vuelve una labor de defensa y justificación constante. A nosotros no nos toca como a los italianos, que a pesar de haber sido sede de las dos entidades mas poderosas y corruptas de la historia, la iglesia y la mafia, se les admira por ser la meca del arte, de la moda, de la arquitectura, y la cuna de algunos de los mas renombrados artistas, literatos y creadores de todos los tiempos. Ni tampoco tenemos la suerte de los franceses que, cuando se presentan como tales los elogian por su pan, sus papas, sus besos, o, en el peor de los casos, por la Torre Eiffel y la costa azul. Y hoy en día se puede decir que nadie relaciona a los ingleses con la imposición del apartheid en Sudáfrica, ni con la colonización sangrienta de Australia, ni con ninguna de las atrocidades que cometieron como potencia imperial, cuando saqueaban las tumbas egipcias y recorrían el mundo entero robando el arte y los tesoros de cada pueblo. Arte que ahora reposa en los museos de Londres, donde nadie cuestiona su precedencia ya que todos son museos "reales". Y bueno, en realidad, ¿que importan un par de masacres, uno que otro santuario ultrajado y un par de cuadros robados cuando David Beckham, Los Rolling Stones y los Beatles son de allá? Y yo me pregunto, ¿como es posible que un par de goles a media distancia, una canción de un puente que se esta cayendo, y cuatro idiotas con el mismo peinado logren borrar la imagen de siglos de atrocidades cometidas por sus compatriotas? Mientras que nosotros, por cargar uno que otro avioncito con cocaína por orden y demanda del tío SAM, somos el diablo en bola.
Todos esos países, que me encantan, y contra los que no tengo nada, tienen una historia de sangre y violencia que si se mide numéricamente, supera las contribuciones que cada uno ha hecho a la humanidad. Pero aun así, brillan. Nosotros tenemos un país en el que lo bueno supera lo malo de forma exponencial. Y a pesar de eso, como diría mi padre, "estamos cagados". La Colombia que existe fuera del país, es de mentiras. De pocas mentiras, pero de tal dimensión, que superan todas las verdades que nosotros conocemos. Y los que hemos vivido en el exterior, tenemos que concientizarnos que la lucha por el país empieza con la imagen positiva que de este presentemos para limpiar la reputación que los mentirosos nos dejaron. Hay que dar la cara. La cara de verdad. Porque es verdad que aquí SE HABLA ESPAÑOL, y no solo eso, sino el mejor! Aquí, las gordas que inspiran a Fernando caminan sueltas por la calle, y Macondo no es mágico, es nuestro realismo…nuestra realidad. Aquí tenemos nieve al nivel del mar en una tierra célebre por su olvido. Y aquí se rumbea por cultura, porque nuestros carnavales son tan increíbles que son patrimonio histórico de la humanidad, porque la verdad es que SOLO en Barranquilla se baila así.
Esa es la Colombia de verdad. La de los ríos y los 2 océanos y las cumbias y los acordeones que le cantan a nuestra diversidad. La de murallas, historias, sierras, valles, montanas y cordilleras que nos surten de climas, especies y flores en toda su variedad. La de los rolos, los caleños, los opitas, y el encanto de la costa y los costeños. La misma que se invento a Gabo, a Carlos, a Juanes y a Shakira, los cuidó y los crió para que ellos salieran a proclamar la grandeza de su madre. La Colombia de verdad fue la que le metió 5 a Argentina en el Monumental de River y la que todos llevamos dentro como nuestra mayor pasión. De esa pasión debemos ser embajadores para que el mundo sepa la verdad de nuestro país. El amor por nuestra tierra y la convicción de su belleza es la mejor arma para luchar contra la ignorancia del mundo por nuestra imagen.
Pero aprendan de mi experiencia y sepan que no han sido suficientes los goles del Pibe, ni las caderas… digo, las canciones de Shakira, ni los 17 Aurelianos Buendía y las Ferminas Daza. Todavía falta. Y prepárense porque como me toco a mí, a ustedes también les tocara responder, son colombianos… ¿no saben lo que eso es?
11 comentarios:
Asia tiene sus maravillas, Europa tiene historia y muy interesante, E.U tiene tecnología, China tiene chinos y hasta para tirar al cielo, pero en COLOMBIA encuentras paisajes q ningún país tiene, exporta muchas cosas, su gente tiene la calidez y el cariño q ni europeos, orientales ni norteamericanos tienen, mujeres bellas, único rodeado por dos océanos, tenemos arepas, bandeja paisa, tamales, empanada, ajiaco, vallenato, salsa, champeta, mejor dicho lo mejor para pasarla del putas.
Estoy totalmente de acuerdo que vivimos en el mejor país del mundo, me doy cuenta cuando colombianos que viven en el extranjero añoran estar en este país. Tal vez muchos no lo entiendan así, pero la campaña imagen país es más que necesaria. "Aunque el problema de imagen del país ya no es tan grande pues en estos últimos tres años hemos mejorado bastante en el exterior siguen teniendo la percepción de droga, violencia, guerrilla, de un pobre desarrollo y de que nos falta clase, estilo y sofisticación. En otras palabras, tenemos una dura imagen, quizá, entre las peores del mundo", pero esto nos incentiva a demostrarles e invitar a esas personas que viven por afuera que se atrevan a conocer, la idea es desafiarlos a que si se atreven se queden… Un gran ejemplo esta en el montón de italianos, españoles, norteamericanos que se quedaron amañados en Cartagena, si se hace un sondeo en la mayor parte del Centro histórico y Getsemani viven extranjeros, si o no? Sin contar las demás ciudades del país.
Me parece algo muy concreto al hacer ver las cualidades de un país maravilloso a través de una marca (COLOMBIA ES PASION) personas como Pirry, Juanes entre otros demuestran que este es un país rico en todo. Aunque en realidad critico a los directores de cine de las películas colombianas porque no cambian su temática de drogas, narcotráfico todo enraizado con un pasado que vivimos sobre capos como Pablo Escobar, los Rodrigez Orejuela y Guerrilla; dichas películas llegan al extranjero y son las ganadoras de estatuillas. La verdad no sé si es que soy muy ignorante pero con estas demostraciones al exterior, nosotros mismo no nos estamos dañando nuestra reputación? Ustedes juzguen.
A pesar de todo vivo en Colombia y me parece lo mejor del mundo o como diría yo la chimba de país.
JENNIFER ESCOBAR SALGUERO
08112053
Totalmente de acuerdo y más si se lleva un apellido que ha marcado al país con tanto dolor y miseria, lo digo porque tengo familia en el extranjero y por llevar el Escobar los tildan de narcotraficantes, drogadictos e incluso asesinos.
Hay que cambiar esa percepción y saber quiénes somos y que tenemos. Recuerdan a Charly García el cantante argentino de rock con su ego trato a Colombia de COCALOMBIA a cualquiera indignaría eso que llegue del extranjero a rebajar a este país. Por eso las campañas sobre Colombia es pasión nos motivan a que sigamos adelante a pesar de todo y que tenemos riquezas que ni los Argentinos u otros países se imaginan, que hay cosas mejores que el narcotráfico, la violencia y las injusticias.
JENNIFER ESCOBAR SALGUERO
Podemos observar toda la realidad a su máxima ponencia que vive cada colombiano cuando sale del país con destino internacional, somos humillados, maltratados, intratados, tildados como los malos, los paracos, los guerrilleros, los narcotraficantes, los drogadictos, entre otros. Pero, la realidad es otra, además de ser todas esas cosas que nos dicen somos personas innovadoras, con grandes ideas, somos grandes investigadores, sino miremos el caso de Manuel Elkin Patarroyo fue el creador de la vacuna contra la Fiebre Amarilla, miremos nuestros grandes artistas, en la NASA tenemos un gran investigador que hizo un estudio sobre el desarrollo de las cucarachas.
Somos gente que siente, que vive, que goza, que creamos, que innovamos, que alcanzamos nuestras metas cuando nos las trazamos, que sorprendemos por no ser predecibles. ¿Por qué entonces dejamos que pisoteen nuestro orgullo en le exterior?, ¿Por qué si Colombia es un país tan hermoso, cada día mas personas quieren residir en otros países?, NO, debemos estar orgullosos de ser Colombianos y nuestra máxima misión debe ser cambiar esa cara tan H O R R I B L E que tiene de Colombia en el exterior, es una tarea que tenemos todos, demostrar lo que somos y lo que de verdad valemos.
Siendo Colombia uno de los países mas hermosos y completos del mundo, debemos mostrarlo con orgullo, somos los únicos que tenemos acceso a varios océanos, que contamos con las cinco estaciones, que tenemos una fauna y flora rica y variada, que solo necesitamos cultivar lo que queremos comer y ahí lo obtenemos, que cambiamos contantemente, somos solidarios y des complicados, colaboradores, ayudamos a todos los que están a nuestro alrededor. No debemos permitir que por unos cuantos nuestro nombre siga dañado. Animo! Cambiemos! Es nuestra oportunidad!
COD: 08112164
Sabemos que colombia es un pais hermoso que tiene muchas cosas que otros paises no tienen.Vemos que en otros paises a todos nos catalogan igual a los que se han encargado de poner en mala imagen a nuestro pais como narcotraficantes, terroristas, entre otos.Esto es un problema para muchos colombianos que quieren buscar nuevos horizontes o conocer el exterior porque esos paises creen que vamos a cometer o ha realizar algo malo, minimo tenemos cocaina en nuestro cuerpo o en algun elementos que traigamos con uno, piensan ellos.
Nosotros como Colombianos tenemos un tesoro, nuestra gente, nuestra naturaleza; es un Pais donde muchos quieran o no y critiquen, quieren conocer y pasarla bueno.
Es un Pais donde no se discrimina raza, color o religion, donde no se le sierran las puertas a nadie.
Es un Pais libre en opinion y dispuesto a dar lo mejor de si. lleno en ingenio e innovacion.
Cuidemos nuestra naturaleza, nuestros rios y mares, de ellos depende la vida de nuestro planeta.
ser colombia es tener a nuestra tirra presente, unque algunas personas no lo sepan, algunas veces nos dicen que somos colombianos solo por tener una prenda que resalte nuestros coloroes de bandera, pero se colombiano no es solo nuestra cultura si no tambien nuestra arquitectura o mano de obra por eso somos reconocidos en cualquier lugar del mundo..
Como primer medida quiero mucho a mi país y veo el muchas cosas buenas, como lo es su gente con muchas ideas y ganas de salir adelante, últimamente ha generado una mala imagen en el exterior por el peligro que ha despertado.
En consiguiente podemos ver que ha generado mucho progreso en cuanto a la industria y a la cultura, creo que hay una gran dificultad y es en el poco interés que le da el gobierno a la educación y la salud por preocuparse más por la guerra.
En el 2025 veo a Colombia con el 5% de aumento de empleo y auge a la salud, puesto que el gobierno esta difícil de cambiar.
Final mente puedo decir que Colombia tiene muchas herramientas para ser una potencia mundial, por eso todos debemos convérsenos que Colombia es pasión.
La imagen que se vende de Colombia en el exterior es errónea y sin sentido, porque los unicos culpables del surgimiento de este tipo de negocios son las grandes potencias mundiales porque estas naciones son los consumidores de drogas, y por medio de la demanda existe la oferta. Debido al desenfreno y a la perdida de sus valores, por el manejo de tanto dinero caen facilmente en el vicio y cada vez exigen más, y Colombia se convierte de manera negativa en el gran provedor, porque es tanta la riqueza de nuestro suelo que se cultiva casi de manera silvestre estas plantas que causan gran dolor y desastre cuando se convierte en la droga maldita. Ser colombiano no significa tener presente estas cosas, ser colombiano implica ser gente honesta, trabajadora, emprendedorra, en fin somos mas; lastimas que sean unos pocos que opacan la belleza de este hermoso pais y de sus gentes maravillosas.
Dios gracias por ser colombiano, aun que sea de mala reputación en el exterior ser colombiano para mi es un orgullo, llevo la mi país en el corazón y en la sangre, no tenemos nada que envidiarle a los demás países solo su tecnología que tarde o temprano pasara por nuestras manos también, Y si es por violencia y trafico quizás no somos los únicos que lo hacemos, hay muchos países que son peores que nosotros incluso hasta mas violentos, pero de todo corazón ser colombiano es lo mas lindo que dios pudo hacer en esta vida, somos un país que todo lo tenemos desde la fauna hasta lo mas lindo que es su gente y su posición geográfica, gozamos de dos océanos, lo hermosos ríos, tradiciones que no se ven en otros países, grandes personalidades, empresas, diversidad de música… a quien no le va a gustar vivir en este hermoso país.. (Colombia es pasión)
Colombia, tierra de guerrilla, paramilitares y narcotraficantes.
¿La mala imagen en el exterior se la debemos al narcotrafico?
yo pienso que la culpa es de nosotros "el pueblo". El amor por Colombia empieza desde la casa, nunca debemos avergonzarnos de la tierra en que nacimos ni dejarnos afectar por los comentarios de los demas, debemos demostrar que en este pais somos mas los buenos que los malos. Pero, para poder demostrar eso lo primero que debemos hacer es tomar conciencia y elegir de forma honesta a nuestros gobernantes (dejar de vender el voto, dejar votar por que me van ha conseguir un trabajo etc..)
Nuestros gobernantes son los encargados de transmitir al mundo entero ese mensaje de confianza, pero desafortunadamente esas personas que nosotros elegimos solo les interesa el veneficio propio y como nosotros nos dejamos comprar la conciencia entonces ¿de que nos quejamos?
Para finalizar, digan lo que digan y piensen lo que piensen, siiiiii
SOY COLOMBIANO ¿Y QUEEEEEEEEEEE?
Me parece una excelente publicación que muestra en resumen la mala imagen que tiene nuestro país en el mundo a pesar de las cosas muy buenas que tiene y que son mayoría.
Como analogía coloco una pared pintada de blanco con un punto negro, la mayoría, si no son todos se concentran solo en el punto negro ignorando la claridad y belleza del blanco.
Muchas veces los medios de comunicación son responsables de alguna forma en incrementar la percepción negativa, por ejemplo, ¿Usted cómo se imagina áfrica? estoy seguro que su respuesta será: "Selva, animales, pobreza, hambre, miseria" etc, pues no todo áfrica es así, solo que en los medios te muestran esa parte negativa y es lo que queda en la mente. Igualmente te imaginas Irak, irán, Afganistán en permanente guerra. Pregúntale a un europeo de visita como se imaginaba Colombia, seguramente su respuesta será: "selvas, guerrillas, drogas y delincuencia" siendo este solo el punto negro de Colombia.
Ahora bien ¿qué hacemos cuando observamos que en una película americana "vista en el mundo entero" mencionan permanentemente que la coca de calidad procede de Colombia o los narcos colombianos?
Es verdad la mala imagen no las hemos ganado nosotros mismos y la razón por la que no se ha podido borrar del mundo entero es porque todavía continuamos alimentándola con la producción de droga. Personalmente pienso que la problemática principal de Colombia no son las guerrillas pero lo es el narcotráfico, que nace de la ideología de obtener el dinero fácil y cuya actividad delincuencial causa un alto derrame de sangre y degenera la sociedad colombiana. No podemos solo criticar y criticar sin actuar, pero ¿Que puede hacer un simple ciudadano? pues bien, tenemos la capacidad de elegir a nuestros gobernantes y ellos el deber de cumplir con las exigencias del pueblo. Si queremos ser percibidos diferentes y de una mejor manera tenemos que ser diferentes, es decir un cambio de aptitud y actitud.
No he tenido la oportunidad de estar en el exterior y sentir ´´mal trato´´, pero es obvia la mala reputación hacia los colombianos. Sin embargo por mucha pasion que haya en nuestro pais, me parece que a veces somos muy poco unidos, territoriales y regionalistas.
¿Colombiano como esperas buen trato en el exterior y que no sean racista contigo, si no lo aplicas internamente?
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